domingo, 28 de agosto de 2011

Impotencia...

Cada cosa que hice este verano, cada persona, cada atardecer en mi paraíso, cada buena película y el libro que me hizo llorar era lo que pensaba escribir para ustedes en mi regreso. 

Sacar el blog del invierno y ponerle... Vida no, porque esa la ha tenido siempre, ponerle color, despertarlo con alegría, pero no. 

En el vecino mundo de la realidad hay crisis, hay sangre, hay lagrimas, y un montón de balas por todos lados. Parece injusto que el reino de los sueños, estando tan cerca de todo, despierte con sol y sonrisas. 

Mis queridos habitantes ríen si escuchan una broma, o van a fiestas en palacios, o pasan días enteros en las hermosas playas... sí lo hacen, pero en todos ellos, si observáis bien, podrán notar de vez en cuanto una beta de culpa en los ojos.  Ya no existe felicidad completa. 

Los príncipes (mis hermanos) viven en aquel vecino reino de la realidad, en esa ciudad de la que muchos de ustedes han de haber escuchado. No estaban entre esas 51 victimas oficiales, ni en las sesentaytantas extraoficiales... pero esta princesa no deja de pensar que pudieron haber estado... 

Claro que aun sonríen, hay reuniones y películas en el cine, trabajan como todos los días y llevan una vida, pero esa beta en los ojos... no se compara con la mía. 
 

1 comentario:

mariajesusparadela dijo...

Así es , princesa: siempre estamos expuesto a que un loco , de repente, en cualquier lugar (Madrid, Londres o Méjico) , nos robe la vida y la alegría.